IU, EA y Aralar, los tres sin aliento

- IU (EB+IUN): 61.158 votos, 2,78%. Sin representación
- Eusko Alkartasuna: 50.121 votos, 2,28%. Sin representación.
- Aralar: 29.784 votos, 1,35%. Sin representación.
Como me he excedido ya bastante en el análisis de los resultados, agrupo en este post a las tres formaciones que han resultado centrifugadas el 9-M.

Izquierda Unida, al igual que en el Estado español, ha salido muy malparada de los comicios. El infinito guirigay interno, la falta de definición, el oportunismo político y, también, el voto útil al PSOE, han laminado a la coalición de izquierda estatal. En el caso de la CAV puede que asimismo haya que colocar en el debe su política de apuntalamiento al PNV en el llamado tripartito.

Los resultados han sido malos en todos los territorios y muestran un declive ideológico y político de preocupar. Dada la nulidad en que ha dejado Llamazares a IU, con él mismo como único diputado, que ICV es otra cosa, los hermanos Madrazo tal vez alberguen la tentación de separarse definitivamente de Madrid e iniciar una aventura en solitario, estilo ICV, con la posible asistencia de los restos del naufragio de Aralar. Una izquierda autónoma vasca, sin maridajes con España, reberberación de aquella Euskadiko Ezkerra de los inicios, la aukera ederra que acabó en los brazos del PSOE. Por cierto que Imanol Zubero ha enseñado ese camino a EB. De asistente de Madrazo a senador por el PSOE, pasando por Aldaketa. Brillante carrera se le augura en la Cámara Alta.

En cuanto a Eusko Alkartasuna, todo está ya medio dicho. Su inanidad ideológica, su campaña ridícula y fuera de tiesto, su intento de acomodarse a un espacio, el de la izquierda independentista, que no es el suyo ni lo huele de lejos, ha arruinado las pocas posibilidades que le quedaban de renovar su escaño por Gipuzkoa. La deblace del hermano mayor, el PNV, ha disimulado un tanto el suyo, que es notable.

Hay algunas gentes en su seno como Intxaurraga, que defienden un reencuentro de la izquierda abertzale (Batasuna, Aralar, EA, independientes...) que puede ser interesante a futuro. Pero dudo que buena parte de EA se considere de la izquierda, esloganes electorales aparte. Yo más bien les veo pidiendo la entrada, por la puerta de atrás claro está, en el batzoki del pueblo, ahora que Urkullu se encuentra tan necesitado de apoyos. En el caso de Iñaki Galdos, uno de los pocos valores políticos que les quedan, esa opción parece la más pausible.

Termino con Aralar, una formación que surgió de Herri Batasuna y que con el tiempo ha ido derivando hacia unas posiciones muy cercanas al PNV. Su inexistencia práctica en Bizkaia y Araba y su escasa chance en Gipuzkoa harán reflexionar a los que aún crean en el proyecto. Aralar tan sólo tiene vigor en Nafarroa Garaia, eso sí, parapetada en NaBai y vigilada de cerca por Sabin Etxea. Sus aventuras en Vascongadas han concluido en fracasos.

La opción de intentar algo nuevo con Ezker Batua puede ser una salida honrosa, pero dudo mucho que se atrevan siquiera a iniciarla. El repliegue en Nabarra se antoja como la mejor opción en espera de tiempos mejores, que no parece que puedan darse en breve plazo. Cosechar esos resultados tan nimios con la izquierda independentista ilegalizada y solicitando la abstención, es un fracaso digno de alguna dimisión que otra. Tal vez lo dejen para abril.