2008/01/30

Los 13 segundos de Atutxa

J.M. Atuxa, J.M. Zalbidegoitia, I. Anasagasti y J. Zubia [ianasagasti.blogs.com]

La manifestación del pasado sábado en Bilbao en defensa de las instituciones autonómicas de la CAV escondía un as en la manga. En declaraciones efectuadas esta mañana a TVE, el señor Juan Mari Atutxa, principal agraviado, se ha quitado la máscara y ha dicho lo que verdaderamente piensa del caso que le atañe.

En el curso de la entrevista, Atutxa se ha preguntado por qué el Tribunal Supremo español no hace "una cosa más sencilla" como "despojar de la condición de parlamentario" a los miembros de Ezker Abertzalea. "Si yo hubiese recibido un auto del Tribunal Supremo diciendo que fulanito o fulanita han sido despojados de su condición de parlamentarios, 13 segundos me habrían bastado para ponerlos de patitas en la calle", ha añadido el ex presidente de la cámara de Gasteiz.

La cuestión por tanto no es protegerse del ataque antidemocrático que viene de Madrid mediante la adpción de posturas de dignidad y firmeza, sino acatar lo que digan los poderes ajenos a la cámara si aciertan con la fórmula que le apetece a Atutxa. Hasta ahí llega su genuflexión a Madrid. Lo de la ilegalización, según parece, no sólo le trae al pairo, sino que incluso le agrada.

No sorprende nada lo dicho por Atutxa, ex consejero de Interior del Gobierno Vasco, ya que su trayectoria política ha estado teñida de azul demasiado tiempo. La desgracia es que quienes le acompañaron en la caminata del sábado (por cierto bastantes menos de los esperados) no van a levantar la voz para afearle su pronuncionamiento. Al contrario, seguirán amparándole como figura emblemática de una cierta resistencia ante los atropellos. Resistencia que suele quedar en levantar el paraguas ante la Audiencia al canto del Gora ta Gora!.

No sé si este es el país que nos merecemos, pero desde luego que es el que tenemos. Y todavía, después de este nuevo episodio de vergüenza nacional, habrá gentes dispuestas a plantear una de frente nacional con semejantes adalides de la democracia.

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