Martillo pilón

Puede gustar más o gustar menos, pero es evidente que la estrategia "de paz" del Gobierno español es contundente como el golpeteo de un martillo pilón. Indiferentes a lo que haga el otro, las tropas comandadas por el ministro de la Gobernación perpetran sus redadas sin titubear. Hace tres meses les tocó en suerte desmantelar Herrira y hoy han sido objeto de su diligencia varios abogados de presos políticos y miembros de la interlocución con el EPPK. 


La izquierda abertzale, desgastada la estrategia negociadora tras el fracaso de Loiola, optó por una estrategia unilateral, arriesgada en sí misma, que pretende mover a los estados español y francés de su inmovilismo congénito. Sin embargo, la unilateralidad, trufada de pragmatismo, choca una y otra vez con el bloqueo instaurado en los ministerios de Madrid y París. El problema es que una vez iniciada la unilateralidad es difícil renunciar a ella, pese a los magros resultados obtenidos.

Es en la batalla de la opinión pública donde la izquierda abertzale puede avanzar y conquistar terreno al enemigo, iniciando de nuevo el cambio de paradigma: Nosotros volvemos a ser los buenos, los que movemos ficha en el camino hacia la paz y ellos son de nuevo los malos, los que se niegan a dar pasos resolutivos, los que no quieren allanar obstáculos.

El pero es que, representando una de las principales patas del escenario político vasco, la IA carece del aparato mediático que por su importancia le debiera corresponder. Y además ante el grueso de los medios realmente existentes, sigue apareciendo como el rival (o el enemigo) a batir.

Mientras, el gabinete antiterrorista español valora con sangre fría sus próximos movimientos en su estrategia de golpear y debilitar a la izquierda abertzale, sin acabar de asfixiarla. Tiene bien comprobado sobre el terreno que su compulsiva cerrazón la sigue obligando a dar nuevos pasos para evitar el colapso. 

Eguneko ataza:

"Ahi ven o Maio" abestia entzutea: http://grooveshark.com/s/Ah+Ven+O+Maio/3pH736?src=5