2011/11/30

Infinitos mundos finitos

El del título de la entrega no es un juego de palabras, sino una hipótesis de trabajo de la comunidad científica. ¿Nos encontramos ante un universo infinito o, por el contrario, ante una colección de universos finitos, del que el nuestro es uno más?

Habrá que seguir reflexionando sobre la cuestión en los próximos años, pero mientras tanto propongo poner los pies en el suelo y tratar de cuestiones más terrenales. De los recientes resultados electorales se pueden realizar infinitas lecturas. Cada cual arrimará el ascua a su sardina y destacará lo que más le convenga. Por lo tanto, es conveniente huir de esas lecturas interesadas y sacar a la luz aspectos que no contribuyen a dibujar mundos idílicos.

Una de las cuestiones que ha dividido a los analistas es la contribución de Aralar a la coalición Amaiur. A bote pronto, se ha dicho que ésta ha sido menor de la esperada. Tengo que decir que tras cotejar algunos datos electorales, por ejemplo los de los barrios de Donostia, la suma de Bildu y Aralar en mayo arroja un resultado prácticamente clavado al de Amaiur en noviembre. Otra cosa es que algunos militantes destacados de Aralar hayan pasado de Amaiur e incluso, como en Nafarroa Garaia, hayan pedido el voto para Geroa Bai. El último congreso no zanjó la cuestión electoral, ni la apuesta estratégica del partido y personas destacadas, como Aintzane Ezenarro o Jon Abril, han mostrado, con su distanciamiento hacia Amaiur, que las aguas bajan turbias.

También es cierto que en el caso de Nafarroa Garaia las cosas no parece que hayan sido idénticas. Es notorio que existe un colectivo de votantes de raíz vasquista que no está dispuesto a dar su apoyo a nada que huela a MLNV, o sea, a la izquierda abertzale de toda la vida. Son gentes del PNV, de Hamaikabat, ex Euskadiko Ezkerra, ex EA, independientes...que han dado su voto a Geroa Bai. En su momento dije que acudir a las elecciones con dos listas era más productivo que hacerlo con una lista única. Esos sectores se verían en un grave compromiso, que les llevaría a la abstención o al voto a Izquierda-Ezkerra. Los resultados confirman el diagnóstico. Se ha alcanzado el mayor número de votos abertzales en unas elecciones a Cortes españolas y dos representantes en las mismas. Y no me quiero olvidar de los cabezas de lista y su influencia. El tirón de Uxue Barkos es innegable y está ahí; el perfil de Sabino Cuadra, persona a la que leo siempre, se decanta muy a la izquierda. Y no digo más.

En el debate sobre la hegemonía nacionalista/soberanista, hay que volver a insistir en que es un debate trufado. Lo importante no es quién saque más apoyos, sino que la suma de ambos cauces arroje suficiente agua para que nos podamos tirar a la piscina autodeterminista en un futuro. Las dicrepancias entre el PNV y la izquierda soberanista van a seguir existiendo, sobre todo en materia económica y social. Pero no deben ser motivo de guerras banderizas, causantes de tantas derrotas a la nación vasconavarra. El ejercicio efectivo del derecho a decidir debe estar en primera línea del horizonte. Tragar algún sapo en aras de ese objetivo superior forma parte del programa.

Volviendo a los análisis postelectorales, ha quedado demostrado que el esfuerzo unitario que ejemplifican las coaliciones Bildu y Amaiur ha sido premiado por la ciudadanía. Ha recibido un plus de apoyos, lo que unido al anuncio de abandono de las armas por parte de ETA, ha generado movimientos subterráneos de voto, impensables hace poco tiempo. A las listas de Amaiur les han dado apoyo gentes de la IA, de EA, de Aralar, de Alternatiba, de la izquierda federal, del PNV y hasta del PSOE. No se puede cuantificar en números, pero el mero hecho de que se haya dado esa confluencia da una idea de que los límites, cuando se hacen bien las cosas, se pueden romper. De que lo finito puede transformarse en infinito (o casi).

Varios portavoces de Amaiur han destacado el dato de que se han conseguido escaños en los cuatro territorios del sur vasco, por vez primera. A este respecto hay que decir dos cosas. Que Amaiur es algo nuevo, incomparable con datos del pasado, ya que una parte del nacionalismo institucional (EA) está dentro de la coalición. El caso de Araba es llamativo, pero también hay que decir que en ese territorio Eusko Alkartasuna ha tenido su historia.

La segunda cuestión es la disparidad de porcentajes de apoyo. Van a continuación unos datos de las capitales y principales ciudades: Primera fuerza en Donostia (24,13%), Zarautz (37,51%), Laudio (27,14%-empatada con EAJ) y Agurain (35,92%); segunda en Eibar (26,98%) y Amurrio (29,33%); tercera en Gasteiz (16,56%), Getxo (15,04%) y Lizarra (16,13%); cuarta en Bilbao (13,77%), Iruñea (14,12%) Barakaldo (12,42%), Portugalete (12,79%), Irun (16,84%) y Barañain (14,21%), quinta en Tudela (3,56%).

Aparece una horquilla entre el 12% de Barakaldo y el 37% de Zarautz, que representa el cauce central de los apoyos y que da una idea de la solidez del voto soberanista/independentista a lo largo y ancho del territorio. Una horquilla que muestra su debilidad en el área del Gran Bilbao, tal vez por el limitado perfil social de la coalición, muy definida, en cambio, en lo nacional. El caso de Tudela y la comarca de Erribera necesitaría un estudio más en detalle, por sus bajos porcentajes.

Es evidente que esta corriente de fondo necesita una consolidación en el tiempo y, sobre todo, en el plano organizativo. Hay quien, como Patxi Zabaleta, adelanta ya futuras confluencias. Ya se verá. Lo prioritario es que la izquierda abertzale central disponga de una cobertura legal para estructurarse en todo el país. La legalización de Sortu sería un paso decisivo en esa dirección, al que seguirían otros, como la reestructuración de Bildu, como agrupación de las fuerzas soberanistas de izquierdas, en el camino hacia la autoderminación. Pero eso son ya cuestiones a captar por el telescopio, como esos infinitos mundos finitos de los que habla el título de esta entrega.

2011/11/22

Sobre el sorpasso

Iñigo Urkullu
El término sorpasso se refiere históricamente a la posibilidad, nunca concretada, de que el extinto PCI (Partido Comunista Italiano) superase en las urnas a la vieja Democracia Cristiana (DC) y accediese al gobierno de la República. El presidente del PNV dice en la prensa que no ha habido sorpasso, en referencia a que Amaiur no ha superado (en votos) a su partido. Sería un tema a discutir, ya que depende de si se miden los votos en Hego Euskal Herria o en la CAPV, y si se suman o no los correspondientes a Geroa Bai, coalición en la que participa EAJ.

Pero no voy a centrar este comentario en una disputa entre número de votos o de escaños, sino en que la afirmación de Iñigo Urkullu denota que en su subconsciente anidaba ese temor y que solo al ver las cifras se ha sentido aliviado. Yo, personalmente, me alegro de que el presidente jelkide se sienta menos nervioso que lo que demostró a lo largo de la campaña.

Y es que leyendo a comentaristas cercanos al PNV, en periódicos y blogs, llega uno a la conclusión de que quienes están obsesionados por la hegemonía abertzale son ellos y no los socios de Amaiur. Creo que la situación resultante, en la que Amaiur dispone de 7 diputados y el PNV de 5 (+1), es irrelevante. Como decia ayer, lo importante es que de 23 diputados a Cortes españolas dilucidados en Hego Euskal Herria, 13 son de obediencia vasca (o navarra) y 10 de obediencia estatal, los 5 de PP-UPN y los otros 5 del PSOE. Una mayoría en la representación que no se había dado en los últimos 35 años.

Habrá que recordar a estos comentaristas que la prioridad actual de la izquierda soberanista e independentista no es arrebatar la hegemonía al PNV, sino encauzar el proceso politico y avanzar hacia la concreción del derecho a decidir del pueblo vasco. Para ello es necesario reunir a las fuerzas dispersas y ponerlas en valor, como se ha hecho mediante Bildu en las municipales y Amaiur en las estatales. Y que como segundo estadio llegará el entendimiento estratégico con EAJ-PNV, en reclamación de ese derecho a decidir que en su día llevó el lehendakari Ibarretxe a Madrid.

Por lo tanto, el sorpasso que interesa es este. Un sorpasso en el que las fuerzas abertzales superen con nitidez a las estatales. Un sorpasso que aglutine, que sume y que ilusione a la inmensa mayoría de los ciudadanos de este país. Y para que ese momento llegue, más temprano que tarde, hay mucho trabajo por hacer. Hay que convencer, con argumentos, a muchos y a muchas, en las grandes ciudades, en Erribera, en Errioxa y en tantos sitios donde aún hay terreno para crecer.

Los proyectos económicos y sociales de PNV y Amaiur son diferentes. Las prioridades de uno y otros divergen en el día a día, en la fiscalidad, en las grandes infraestructuras, en muchas cuestiones. Hay que hacer una lista conjunta de discrepancias, reconocerlas y pactarlas. Para seguidamente poner manos a la obra en la tarea de abrir un espacio soberano en el mapa de Europa a una nación llamada Euskal Herria (o Euskadi), como más le guste a la mayoría.

    Estekak:

  • El PNV, Amaiur y la falsedad matemática - Iñaki Iriondo [gara.net]

2011/11/21

Mayoría de edad

Los resultados de las elecciones a Cortes españolas han deparado un cambio sustancial en el mapa político vasco. Por vez primera una fuerza soberanista e independentista ha logrado la mayoría de escaños, con siete, por delante de PNV (5), PP-UPN (5) y PSE-PSN (5). Con uno ha quedado Geroa Bai, participada también por el PNV. De los 23 escaños en liza para el Congreso de Madrid, 13 han quedado en manos de fuerzas vascas, lo que teniendo en cuenta que estas son las elecciones menos favorables a las candidaturas abertzales, es un dato esperanzador.

Ya sabemos que con las cuestiones electorales hay que andar con pies de plomo. Lo que hoy es negro puede ser mañana blanco. Nada es inmutable, ni siquiera la primacía jeltzale, cada vez más erosionada por su ambiguedad y su falta de ideas que enganchen a la población. Pero la actual ola soberanista concretada en Bildu/Amaiur no tiene porque ser eterna. Su mantenimiento dependerá de que las cosas se hagan bien. En caso contrario la ola cesará. Podría decirse que se ha alcanzado la mayoría de edad, pero los adultos también pueden equivocarse.

Habrá tiempo de analizar la gestión de la victoria por parte de los componentes de la coalición. Lo que toca ahora es reconocer que la nueva estrategia de la izquierda abertzale -motor de Amaiur-. en la que la M sobra y estorba, como dijo Arnaldo Otegi, funciona a las mil maravillas. Una estrategia que pasa irremediablemente por la suma de fuerzas soberanistas de izquierda, para en un segundo escalón intentar concertar con el PNV sobre el derecho a decidir de este pueblo. En esa tesitura, a ELA, visto lo visto, no se la espera.

Una estrategia que debe tener entre sus prioridades la implicación de la comunidad internacional. La senda de Aiete debe seguir alimentada, contando con el empuje que ofrece la amplia representación institucional cosechada. Los diputados y senadores deberán trabajar en Madrid por los derechos nacionales y las ideas de izquierda, por supuesto, pero deberán también salir a Europa, al mundo, para difundir las ideas centrales de la coalición e intentar que el mensaje de la solución política al conflicto gane adeptos.

Ante la enorme crisis económica y sistémica con la que nos enfrentamos, la izquierda soberanista e independentista deberá también ofrecer sus recetas. En la defensa de las conquistas sociales, contra los recortes, en contra de la corrupción, a favor de una mejor gestión de las instituciones y por una salida de la crisis que no perjudique a los de siempre, a los trabajadores, a los de abajo. El perfil abertzale de la coalición es clarísimo, nadie lo va a poner en duda, ahora bien, el perfil de izquierdas, socialista avanzado, hay que trabajárselo más.

Es tiempo de celebraciones, de alegrías, de satisfacciones. Pero un tiempo cortito, porque el proceso sigue ahí, en stand by, y con un PP que ha obtenido la mayoría absoluta por desfallecimiento del contrario. No será fácil avanzar en semejante campo de minas, pero es innegable que el tanque de combustible está lleno a rebosar, lo que hará más llevadero el viaje. No van a faltar dificultades, pero torres más altas han caído. Y sino que se lo pregunten a Pérez Rubalcaba



2011/11/16

Europa&Goldman&cía

Sede de Goldman Sachs en New York
Me he considerado siempre un europeísta tibio, escéptico, a favor de un continente en paz, sin armas nucleares, pero en contra de una Europa dominada por los intereses capitalistas de corto alcance. La actual crisis económico-financiera no ha hecho sino aumentar mi desconfianza con la Unión Europea, con todas sus inoperantes instituciones y con los gobiernos estatales más poderosos. La unión mercantil ha resultado insuficiente. O Europa da un paso al frente y se unifica fiscalmente, emitiendo deuda de forma unitaria y convergiendo mucho más en lo político, o no tiene futuro.

Lo que pasa es que, sabiendo que la solución pasa por fortalecer Europa y sus débiles instituciones, me temo que en tal supuesto habría que repensarse la vocación europeísta de muchos, entre ellas la mía particular. Una Europa que no respetase la personalidad de Euskal Herria, en aras a un mayor centralismo de Bruselas, no sería plato de buen gusto en este país, ni tan siquiera entre los jelkides que se enorgullecen de haber compartido mesa y mantel con los padres fundadores, en tiempos de la democracia cristiana. Y es que la soberanía fiscal desaparecería, sin duda alguna.

Sigo estimando el esfuerzo europeísta por superar los históricos conflictos interestatales que han daddo lugar a tantas guerras y disputas. A ese bagaje de entendimiento entre los pueblos me apunto sin recelo. Pero el espectáculo al que estamos asistiendo desde hace ya unos cuantos meses se está convirtiendo en insoportable. En estos momentos, en Europa nadie sabe qué hora es.

Para mayor abundamiento en el recelo, hoy se difunde en los medios un dato estremecedor. El recién estrenado presidente del BCE, Mario Draghi; el nuevo primer ministro italiano, Mario Monti y su homólogo griego, Lucas Papademos, coinciden en haber sido todos ellos altos ejecutivos del banco estadounidense de inversiones Goldman Sachs. Solo hay que recordar que la crisis actual viene derivada de aquella inicial, que surgió precisamente por la operativa fraudulenta de los bancos de inversiones de Estados Unidos, entre ellos Goldman Sachs. Por lo tanto, se ha puesto al frente de esas instituciones a personas procedentes del propio origen del problema.

Ante esta demostración de despotismo bancario, en la que los gobiernos surgidos de las urnas son sustituidos por otros de técnicos, en los que aparecen banqueros y militares, se hace necesario un serio replanteamiento de qué Europa queremos, qué Europa necesitamos e incluso si es el modelo actual de Unión Europea, dominado por Berlín y París, aceptable para los intereses mayoritarios del pueblo vasco. 


Estekak:

2011/11/15

Artículo primero

El Reino de España es un Estado de Derecho, como lo demuestra la última sentencia de su Tribunal Supremo, conocida hoy, que absuelve a cuatro guardias civiles condenados por torturas por la Audiencia Provincial de Gipuzkoa en 2008. El artículo primero de ese Estado de Derecho dice que Aquí no se tortura y el segundo afirma que en caso de que se diesen torturas se aplicaría el artículo primero. Así se ha hecho.

La sentencia no puede sorprender a nadie, porque llevamos demasiado tiempo acostumbrados a que el Estado no depure responsabilidades sobre los funcionarios que se extramilitan en sus funciones. El episodio de los GAL es paradigmático al respecto. La palabra más suave que se me viene a la cabeza es impunidad.

Sería esperanzador, ante el nuevo escenario que se dibuja, que algunas de esas voces que se elevan indignadas, con toda razón, ante la violencia de un signo, dijesen algo ante esta bochornosa cuestión que nos ocupa. Ya sé que peco de ingenuo, pero mantener un pequeño grado de ingenuidad, una vez traspasados los cincuenta, dicen que es una práctica muy saludable.

Estekak:

2011/11/11

A Urkullu no le gustan las encuestas

Se podrán decir muchas cosas sobre Iñigo Urkullu, actual presidente del EBB de EAJ-PNV, pero nadie podrá acusarle de ser un político mal informado. Su relación con internet viene de lejos y siempre sabe reaccionar a tiempo de las noticias que van sucediéndose. Nunca le pillarán en renuncio.

Estos son días de encuestas, por aquello de que hay elecciones el próximo día 20. Urkullu ha debido leer con mucha atención la del CIS, la del Gobierno Vasco, la de Gizaker, la de Cies y hasta las suyas propias, que seguro que las tiene. Todas ellas coinciden, aparte de los empates técnicos que se lanzan al aire para despistar, en que los resultados de su partido son manifiestamente mejorables. Vamos, que ganar, lo que se dice ganar, solo en Bizkaia.

La constatación preocupa, y mucho, al máximo dirigente jelkide. Y se le nota. En su sitio durante la Conferencia de Aiete y ante el anuncio de ETA; descolocado ante la entrevista que hoy publica "Gara". Mientras el ministro del Interior, Antonio Camacho, la saluda como una reafirmación de la voluntad de la organización por acabar con la lucha armada, Urkullu desbarra hablando de que es "una aberración democrática, política y ética". ¿Se referirá a la misma entrevista?

Hace unos días comentábamos los deslices de algunos titulares del diario de cabecera de Urkullu, empeñado en amargar el desayuno a sus lectores con noticias sobre escisiones y vueltas a las andadas. Ahora es el propio Urkullu el que muestra cierto nerviosismo, cuando podía haber recurrido, como Rajoy, al tópico de no hacerles la campaña a los de siempre. Debería estar más tranquilo el líder jelkide, y confiar más en el poder de seducción de Josu Erkoreka, empeñado en ligar a Amaiur con el Opus, que esa es otra. Por cierto, ¿a qué se refiere con lo de la capucha blanca?

2011/11/10

Mikel Arregi

Memoria frágil ostentan quienes insisten en decir que el 10 de noviembre es el único día del año en el que no se han producido actos violentos en este país. Al menos se sabe de uno. En esa fecha del año 1979 fue abatido a tiros, en un control policial situado en la carretera que va de Etxarri a Bakaikoa, Mikel Arregi, concejal de Herri Batasuna. Hoy hace 32 años.

Mikel fue una de las víctimas de este largo conflicto y fue muerto por su ideología. Ni era militante de ETA, ni portaba armas. La escultura que se erigió en su memoria ha sido atacada y dañada en múltiples ocasiones, la última hace dos años. En su pueblo natal, Lakuntza, existe una calle con su nombre.

En estos días posteriores al anuncio de cese definitivo de ETA se habla de víctimas, de memoria, de perdón, de reconocimiento del daño causado. Algunos hablan incluso de reconciliación. Es evidente que hay muchas personas de buena fe que creen en todo ello y es posible que se avance en ese camino en los próximos tiempos. Pero mientras se orille una parte de lo sucedido, mientras  el sufrimiento de unos valga más que el de otros, no se podrán cerrar las heridas. O se cerrarán en falso, que es aún peor.


Estekak:

2011/11/09

Titulares sobrados

Un periódico bilbaino se esfuerza últimamente en ofrecer a sus lectores titulares llamativos, lo que está muy bien, y se agradece, mezclados con otros que rezuman mal olor, o malas intenciones. Y ese periódico no es "El correo".

Hace unos días me eché a temblar al leer en su primera que empresarios internacionales se mostraban temerosos ante la llegada de Bildu a las instituciones, en especial a la Diputación de Gipuzkoa. Por lo de los datos fiscales, ya se sabe que estos filoetarras... Hoy nos vienen diciendo, de acreditadas fuentes policiales, que hay grandes probabilidades de que los "duros" de ETA consumen una escisión tras el 20N.

Mejor harían en dedicarle algo de tiempo al asunto de Errigoiti, en desmenuzar el plan de nuevo estatus político para 2015 o en significar que el clima general en Euskal Herria, y no me refiero al atmosférico, mejora semana a semana. Y es que para periodismo amarillo nos basta con el de "El mundo", ese diario al que algunos llaman ahora el inmundo.

2011/11/07

Lo llaman debate, y no lo es

La mayoría de medios de comunicación prestan un inusitado espacio al cara a cara entre Pérez Rubalcaba y Rajoy, los dos máximos representantes de la socialdemocracia y la derecha viejuna, respectivamente. Dicen que es el hito principal de una campaña electoral, que no lo es.

Ni se debaten asuntos de calado, ni se cruzan ideas, ni se aportan novedades. Todo consiste en criticar al adversario, que no guarda ninguna cualidad, y ensalzar las virtudes del candidato propio, convertido por unos días en superhombre sin mácula.

El debate, los mitines, las caravanas, en general toda la campaña suena a caduco, a película vista y requetevista. Los partidos y coaliciones, las formaciones que quieran aportar algo novedoso, deberán retorcerse las meninges sin quieren motivar a esa gran mayoría de pacientes espectadores sin ilusión. Tal vez en las nuevas tecnologías esté parte de la solución ante tan descomunal falta de imaginación de casi todos. O no.

2011/11/04

Lo importante y lo accesorio

Josu Erkoreka (EAJ)
Comienza otra campaña electoral, tan aburrida y previsible como las anteriores. Una campaña que, sin embargo, será la primera tras el anuncio de cese definitivo de la actividad armada por parte de ETA. Las nuevas elecciones traen novedades, claro está, el clima general va cambiando, los candidatos se retratan en los diarios sonrientes, desde el PP hasta Amaiur, en unas fotografías que ejemplifican ese nuevo clima, aún incipiente. Tan incipiente que a un candidato navarro al Senado le acompañó anoche la policía a pegar carteles, confundiendo los agentes las paredes del barrio de Iturrama con la cara del señor Compains, de Amaiur. En dominios de Yolanda Barcina tenía que ser donde ocurriera semejante abuso policial.

Pese a que la campaña electoral va a presidir la actualidad estos días -junto a la crisis económica- no me voy a referir a ella en este comentario, sino a la distinción esencial en política entre lo importante y lo accesorio. Por ejemplo, me parece importante trabajar por la construcción nacional de este país, desde las instituciones, desde las fábricas, desde las organizaciones no gubernamentales, desde las pequeñas asociaciones culturales o deportivas. En cambio me parece accesorio cuadrar a cualquier precio las cuentas de los ayuntamientos.

Todos sabemos que existe la gran política, la de las grandes proclamas, los programas máximos, la de los derechos y deberes de los ciudadanos. Tambièn sabemos que existe la pequeña política, la de arreglar una acera, colocar un semáforo y adecentar una plaza. Las dos son necesarias, hay que compatibilizarlas. Otra cosa es que por mor de satisfacer los requerimientos de la pequeña política, del día a día institucional, sacrifiquemos los de la gran política, o al menos no los valoremos en su verdadera dimensión.

No se trata de quedarse embelesado contemplando los grandes principios y las grandes frases de los padres fundadores. En la política siempre viene bien una adecuada dosis de pragmatismo. Lo que quiero decir es que, a veces, los recovecos que exige la gestión diaria llegan a confundir el lugar en el que se encuentran los mojones del camino principal.

El espejo que nos brinda el partido nacionalista histórico es revelador. Nacido para llevar al pueblo vasco a la independencia, se consuela con gestionar el mayor número de instituciones, perdiendo el objetivo principal por el camino. Es verdad que habla ahora de un estatus politico nuevo para 2015, siempre a futuro, pero lo que le ocupa no es ese señuelo sino lograr el mejor resultado posible y rezar para que el PP no alcance la mayoría absoluta y necesite por ese motivo sus votos en el Congreso. De esa forma podría seguir arrancando transferencias para la CAPV hasta el juicio final.

Espero que la irrupción institucional de Bildu y la probable de Amaiur (con el proyecto de Sortu sin legalizar, no lo olvidemos) no convierta la preocupación por lo inmediato en la línea maestra a desarrollar. Hay socios de la coalición que respiran cómodos en lo institucional y que pueden verse tentados a ello. Lo decisivo, en todo caso, es que el árbol cotidiano no nos impida ver el bosque nacional a cuidar. Todo lo que vaya en esa dirección debe ser apoyado, y lo que signifique un obstáculo o un mero pasatiempo, orillado. Euskal Herria sufre demasiados y profundos problemas para que la gente más interesada en resolverlos desperdicie sus energías en arreglar los entuertos de quienes les precedieron en puestos de responsabilidad.